domingo, 30 de diciembre de 2007

La última entrada del año

Se acaba el año 2007. En estas fechas de recogimiento navideño, suele ser común el hacer un balance de todo lo que nos ha traído el año. Al menos, los diez minutos antes de tomarse las uvas. En todos los diarios y TV se hace un recordatorio de lo más destacado del año. Algunos, incluso, terminan legislatura y hacen balance más amplio todavía. Lo cierto es que no acostumbramos a tener buena memoria. Yo no se si os pasa a vosotros, pero como estoy tan pendiente del presente, y tan preocupado por el futuro, los sucesos pasados (aunque solo sean de hace medio año) me parecen muy lejanos. Y no están tan lejanos, ni mucho menos…

Cada uno de nosotros hemos tenido vivencias propias, únicas y especiales que nos han marcado en mayor o en menor medida. En este año ha habido experiencias de todo tipo. Buenas y malas. Algunos, terminaban bachillerato y han empezado una etapa de su vida completamente nueva en la Universidad. Otros empezaron cerca y se fueron lejos. Y no pocos se marchan con el nuevo año, aunque también los hay que vuelven. Yo mismo terminaba mi carrera e iniciaba el redescubrimiento de la Universidad con el post-grado. De hecho, los hubo que empezaron el año llenos de dudas, pero los ha habido que lo han terminado con más todavía. Hemos querido, hemos odiado, hemos salido y bailado, hemos fumado, jugado, y sobretodo, bebido. Bien por “Héroes”, “Perdidos”, “Prison Break” y “Roma”. Tirando a los dados, la suerte nos ha llevado a conocer gente nueva, especial… pero también a otras que nos han dejado indiferente. Hemos ganado amigos. Pero también algunos vínculos se han resentido. Este verano, algunos han disfrutado de unas buenas vacaciones. (Si no tenían perro). Eso si, la mayoría, a la playa en busca del sol. ¡Tantas cosas este año!

¿Cómo resumir un año entero de vivencias en tan poco espacio? Cada uno hemos tenido nuestros momentos de glorias y de miserias. Pero de eso se trata, de vivir. Para los judeo-cristianos, la vida humana, como la historia, tiene un desarrollo rectilíneo, que nace y muere como un río. Para los antiguos griegos, la vida era cíclica, circular, y la historia se repetía siempre. Yo, personalmente, siempre he tirado por el camino de en medio. La vida, para mí, sigue una tendencia rectilínea, pero retrocede y avanza, retrocede y avanza, siempre hacia arriba, como en un muelle. Caemos muchas veces en los mismos errores, pero de cada experiencia aprendemos, nos queda un poso, que nos hace algo menos ingenuos y un poquito más sabios. Supongo que es optimista, pero creo que la gente cambia, y en algunos aspectos al menos, mejora. Un año de experiencias puede ayudarnos a ver la vida como un tapiz con más matices, con más colores. Pero no hay que ser banales, hay que quedarse con lo bueno y con lo malo. Porque, si no hubiera malo ¿Cómo saber que es lo bueno?

Quiero daros las gracias a todos, lectores, por haberme acompañado en este inicio de mi blog. Se que sois una mezcolanza de parientes, amigos de Arnedo, amigos de la resi, ex-compañeros de clase (hasta de francés), colegas de master, visitantes ocasionales, algún Erasmus y, pronto, algunos trans-continentales. A todos, mi agradecimiento por seguirme y por vuestros comentarios, que son siempre enriquecedores. Para el año próximo tengo pensadas algunas entradas centradas algunos de los eventos que nos depara; las Elecciones Generales, la Expo de Zaragoza y los Juegos de Pekín. Sobre el primer tema, intentaré preparar algunas entradas analizando la última legislatura desde varios enfoques y materias, además de explicar bien el Sistema Electoral y seguir la campaña. Merece la pena estar informado. Del segundo y tercero, colgaré bien de fotos, videos y anécdotas. ¡No prometo nada con Pekín, pero al menos a la Expo espero ir!

Sin más, amigos, despedir el año. No hagáis buenos propósitos. Según un centro de estudios londinense, solo se cumplen el 12%. Y si no podéis evitar la tentación, hacedme caso. Dejaros de pamplinas y desead ser felices. Yo este año que entra, con afecto, así os lo deseo. Tengo un pálpito, este 2008 será un gran año. Promesa.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Los orígenes de la Navidad

Ya están aquí. Se acercan las comilonas, los regalos, las reuniones familiares. La Navidad. Para muchos, tiempo de paz y alegría, para otros, simplemente, vacaciones. Sin embargo, muchas veces hacemos las cosas sin conocer siquiera sus orígenes. ¿Por qué se celebra la Navidad estos días y no otros? ¿De donde nacen nuestras costumbres para estas fechas? Me he documentado un poco y os presento un resumen de algunos hallazgos interesantes… Los orígenes de la celebración de la Navidad el 25 de diciembre, se ubican en las costumbres de los pueblos de la antigüedad que celebraban durante el solsticio del invierno (desde el 21 de diciembre), alguna fiesta relacionada al dios o los dioses del sol, como Apolo y Helios (en Grecia y Roma), Mitra (en Persia), Huitzilopochtli (en Tenochtitlan), entre otros. Algunas culturas creían que el dios del sol nació el 21 de diciembre, el día más corto del año, y que los días se hacían más largos a medida que el dios se hacía más viejo. En otras culturas se creía que el dios del sol murió ese día, sólo para volver a otro ciclo.

Para los romanos, el 25 de diciembre la fiesta del "Natalis Solis Invicti" o "Nacimiento del Sol invicto", asociada al nacimiento de Apolo. El 25 de diciembre fue considerado como día del solsticio de invierno, y que los romanos llamaron “bruma”; cuando Julio César introdujo su calendario en el año 45 a.C., el 25 de diciembre debió ubicarse entre el 21 y 22 de diciembre de nuestro Calendario Gregoriano. De esta fiesta, los primeros cristianos tomaron la idea del 25 de diciembre como fecha del nacimiento de Jesucristo. Otro festival romano llamado “Saturnalia”, en honor a Saturno, duraba cerca de siete días e incluía el solsticio de invierno. Por esta celebración los romanos posponían todos los negocios y guerras, había intercambio de regalos, y liberaban temporalmente a sus esclavos. Hay cierto parecido con las tradiciones que seguimos hoy día ¿Verdad?

Los germanos y escandinavos celebraban el 26 de diciembre el nacimiento de Frey, dios nórdico del sol naciente, la lluvia y la fertilidad. En esas fiestas adornaban un árbol perenne, que representaba al Yggdrasil o árbol del Universo, costumbre que se transformó en el árbol de Navidad, cuando llegó el Cristianismo al Norte de Europa. Los mexicas celebraban durante el invierno, el advenimiento de Huitzilopochtli, dios del sol y de la guerra, en el mes Panquetzaliztli, que equivaldría aproximadamente al período del 7 al 26 de diciembre de nuestro calendario. "Por esa razón y aprovechando la coincidencia de fechas, los primeros evangelizadores, los religiosos agustinos, promovieron la sustitución de personajes y así desaparecieron al dios prehispánico y mantuvieron la celebración, dándole características cristianas."

Tal y como comenta Isaac Asimov
en su guía de la Biblia: “Podría ensamblar el cristianismo sin sobrepasar su felicidad de Saturnalia. Era solamente necesario que ellos justamente saluden el nacimiento del hijo en vez que el del Sol”. El cristianismo, edificado sobre el cadáver de Roma, y con una prodigiosa capacidad para la adaptación, incorporó tradiciones de las festividades paganas con notable éxito. Hoy, por supuesto, todo eso ha perdido bastante vigencia. Tenemos otros dioses.

Consumus maximus, ora pro nobis

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Cuando un amigo se va

Hace ya más de 4 años, yo iba con otro grupo de gente al principio. Durante los primeros días, la soledad claustrofóbica de la 429 había hecho mella en mí y solo la archi-conocida Isis lo rompió invitándome a cenar a su habitación, a la que bajaba de vez en cuando. Una noche, que ni siquiera recuerdo, me quedé sin pan y pasé a pedírselo a Jordi, un ibicenco de la 430 (¿Qué será de él?) Sin embargo, fue Julio, que tenía la puerta abierta quien se asomó presto con un pedazo de pan. Esa fue la primera vez que nos vimos. El jueves de la segunda semana se hizo la fiesta en la playa, y recuerdo que conocí allí a Joan y a Héctor. El primero me dirigió en una obrilla de teatro improvisada y aderezada con bien de alcohol. (Mi papel de Hitler en la II Guerra Mundial fue un homenaje a Chaplin…) Con Héctor hablé sobre la residencia, y me expuso algunas quejas que tenía sobre el servicio. Desde ese punto, teniendo a Julio en la 435 y a Héctor en la 434, pasaba a cenar a su cocina compartida.

Ha habido durante los últimos 4 años algunas rutinas que han permanecido inviolables. La tortilla Mercadonna acompañaba siempre mis charlas con Julio. Hablábamos sobre todo tipo de cosas los viernes, antes de que cogiera el tren de vuelta a Tarragona, comentando las jugadas de los jueves universitarios. Cuando terminábamos clase temprano (Yo nunca tenía por la tarde) siempre quedábamos y nos íbamos a dar una vuelta al centro (Es decir, al FNAC). Terminaba cayendo siempre un CD o un libro. Lo normal era tomar la ruta que pasaba por Princesa, Jaume I y las callejuelas aledañas a las Ramblas. Por el camino nos enredábamos en charlas distendidas, la mitad del tiempo riendo. ¿Cómo olvidar la vez que pasmas por “Petra” y rimamos a la par a voz en grito, dejando alucinado a un anciano que se cruzaba con nosotros?

Julio es un chico tupperware. Desde que lo conozco, ha comido las más exquisitas delicias de su madre, si bien no siempre a las horas más acertadas. Los canelones están bastante buenos, pero me sigue resultando difícil el concebir que alguien cene garbanzos o lentejas… Y cada domingo, cuando vuelve de casa, llega hacia las 10 de la noche con su maleta cargada de nuevos tupper para la semana. Además, por descontado, de un bocadillo de chorizo con queso, que se calienta ligeramente en el microondas. Es que Julio es un hombre de costumbres. Cada diciembre se compra el calendario de chocolate numerado, abriendo una casilla cada día para comer la chocolatina. Año tras año, un poster de la “La Comunidad del Anillo”, de “Eminem” y ya más recientemente, de la Jessica Alba de “Sin City” decoran su habitación. En su cocina hemos tenido infinitas conversaciones sobre lo humano y lo divino. Además de hecho grabaciones míticas. Desde “Isis Revolutions” hasta “El Calamar”. Y nos hemos reido no poco con “Tu Ano”. Pero no todo ha sido broma. Sólo recordar los quebraderos de cabeza que nos han dado las mujeres, la de complicaciones que nos hemos armado por su culpa. Desde que empezó el año primero, ya estábamos los chicos reunidos en “petit comité” por las noches para estudiar cada situación.

Hay algunas cosas que me han puesto nervioso de Julio toda la vida. ¿Cómo lo hará para posar siempre con la misma cara en las fotos? ¿Por qué apila las monedas en la cabecera de la cama con tanto orden? Son algunas de esas rarezas que le hacen ser como es. Yo lo introduje en “Scrubs” y ahora se ha tragado todas las temporadas. Hemos salido a los prescindibles “Túnel”. Me ha dado rabia que te las llevaras de calle. Y que organices los planes de todo el mundo, saliéndote con la tuya a toda costa. Economista no se, pero negociador eres un crack. No hay manera de que no salgas ganando cuando se monta algo. El “Hard Rock” lo hemos frecuentado solo por tu insistencia, y eso que la calidad precio, en fin, ahí está. Eres sociable hasta la nausea. Si se te pone entre oreja y oreja que alguien venga con nosotros a cenar, llamas a su puerta día sí y día también. Y vergüenza has tenido siempre muy poca si hablamos de una chica… (Que se lo digan a las gallegas)

Julio se nos va. Tiene que cruzar el charco para ir a Boston, a aprender a ser un pilar de la tecnoestructura del capitalismo militante. Te imaginaría firmando despidos a punta pala de no conocerte. Lo cierto es que te daría tanta lástima despedir a la gente, estarías tanto tiempo pidiéndoles perdón (¡Sensiblero!) que optarías por reducir el margen de beneficio. Te nos vas por seis meses, un punto y aparte demasiado largo. Cuando estés de vuelta, ya nada será lo mismo. Tendrás que incorporarte al mundo laboral, empezar a hacerte rico. Te echaremos de menos, porque sin ti el pasillo de la cuarta planta queda cojo. Serán largos meses. Pero no temas, porque cada viernes esperaré en mi habitación la misma llamada de teléfono para que te caliente el tupper en el microondas. Esperaré aquella frase de “¿Comemos?”. Como si te acabaras de levantar en pijama. Como si nunca te hubieras ido.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Caballo de Troya

El mundo del Bienestar

El otro día, hablando con una compañera, se me ocurrió el tema adecuado para esta nueva entrada. Hablando sobre la realidad de nuestros diferentes países, me di cuenta de la gran verdad de que estos años de universidad no han terminado de curarme de mi falta de perspectiva, que aún me falta sentido de la realidad. La discusión versaba sobre los Estados de Bienestar, y yo estaba criticando duramente la limitación de las políticas sociales en España. Ella, que es peruana, se mostraba muy sorprendida por el hecho de que me estuviera quejando. “En Latino América” decía, “es imposible plantearse la posibilidad de que el Estado nos de plata”. Simplemente era inconcebible la existencia de políticas destinadas al bienestar de los ciudadanos. Donde aquí nos parece normal que el Estado, en cierta manera vele por nosotros, saliendo de Europa esta perspectiva no es ni mucho menos extendida ni generalizada.

La clasificación de los Estados del Bienestar nació de manos del sociólogo sueco Gösta Esping-Andersen, profesor de la UPF. Y estableció la existencia de tres tipos ideales en función del grado de mercantilización (peso del mercado en la situación socio-económica) y de familiarismo (importancia de la familia en el sostenimiento individual). Por lo general, los tipos ideales coincidían con la tendencia a predominar de una determinada tradición política. El estado social-demócrata (o nórdico) se caracteriza por una baja importancia del mercado y de la familia, donde las prestaciones sociales son generosas y universalizadas. El estado conservador (o continental) se basa en que el mercado posee algo más de importancia, y las ayudas no están universalizadas, sino que se de destinan a las familias. Por último, el Estado liberal posee el mayor peso del mercado, con políticas sociales solo para la pobreza extrema, y los receptores son los individuos. Algunos autores añaden el Estado del Bienestar sud-europeo, con elevado peso del mercado y de la familia de manera simultanea, un combinado entre el liberal y el continental.

Esta clasificación es útil teóricamente, pero se le podría criticar por su Euro-centrismo, una limitación común en la Academia. ¿Acaso no hay un resto del mundo a nuestro alrededor? Parece como si todos los pueblos de la Tierra debieran copiar nuestros modelos, más allá de sus situaciones concretas. Desde luego, África o América Latina merecerían un análisis pormenorizado. En el continente africano, la ausencia de un Estado consolidado y la permanencia de lazos étnicos y tribales generan redes de socialización paralelas. ¡Cómo afectará eso a sus poblaciones respectivas! Su extrema pobreza, élites corruptas y sátrapas locales, sus problemas endémicos de SIDA y guerras… Como decía Haro Teclen, a diferencia de en la II Guerra Mundial, esta vez sí sabemos donde están los campos de concentración, y los tenemos al otro lado del Estrecho. América Latina, mucho mejor que África, afronta también no pocos retos. Sus enormes desigualdades internas, la corrupción o los problemas de crecimiento económico ponen no pocas trabas.¿Y qué decir de Asia y Extremo Oriente? ¿Acaso allí tampoco es posible el bienestar?

Me gustaría recalcar dos ideas que me surgen de esta reflexión. La primera, que tenemos una visión del mundo demasiado limitada. Por más que nos hablen de “globalización” lo cierto es que seguimos pensando muchas veces en términos de nuestra aldea. Es una visión legítima, pero parcial. Nunca está de mas que tengamos una visión de amplio espectro de lo que nos rodea. Sobretodo en relación con mi segunda idea; y es el ser más humildes y valorar lo que tenemos. No nos podemos ni imaginar el frío que hace en el resto del mundo fuera del Viejo Continente. Donde aquí nos quejamos de nuestras dificultades para salir del mil-eurismo, en otros países se quejan de las dificultades para llevarse algo a la boca.

No pretendo ser emotivo. El mundo está muy mal, no es una novedad para nadie. Pero a lo que sí nos deberíamos comprometer es, no sólo a legítimamente quejarnos de lo que nos merecemos, sino también a valorar lo que tenemos. Los politólogos siempre hemos valorado a España como uno de los países a la cola del Estado de Bienestar respecto del resto de Europa. Pero, colegas, comparado con el resto del mundo, no me lo pienso. Me quedo con el país de la pandereta.

viernes, 14 de diciembre de 2007

El Acto de Graduación

Este sábado 15 de diciembre se celebrará el acto de graduación de la promoción de 2007. El acontecimiento transcurre en tres sesiones diferentes, una de mañana (empieza a las 12) otra dos de tarde (a las 4 y a las 7 respectivamente). La de Ciencias Políticas se sitúa en la franja central debiendo los estudiantes estar con media hora de antelación en el patio cubierto del edificio Roger de Lluria. El programa es esencialmente aburrido. Comienza con un discurso de presentación de un profesor, para venir seguido por una actuación del coro de la Pompeu. Es en ese momento en que se hace entrega de las Premios Extraordinarios de la Carrera, que desfilarán solemnemente hacia la entronización de su triunfo. Tras esto, todos y cada uno de los licenciados, por orden de carrera, saldrán a la tarima a recoger su diploma, conseguido con no pocas tardes de biblioteca. Tras esto, quedan tres discursos más. Uno del representante de promoción, otro del rector, y otro del presidente del Consejo Consultivo para cerrar con el Gaudeamus Igitur del coro. Por último, nos ofertaran una miserable copa de cava la Asociación de Antiguos Alumnos.

Vayamos a lo que interesa de este trámite. La primera de las tribulaciones que han surgido entre los conocidos ha sido la del tipo de ropa que llevar. Las chicas han ido a comprarse vestidos y complementos para rivalizar entre ellas. Parece razonable. Pero yo he hecho una exitosa campaña para que los de Ciencias Políticas no llevemos corbata. Básicamente porque considero que nos uniformiza en exceso con los pringados de derecho, y necesitamos dar un toque de realidad al acto. Los trajes vienen a ser el uniforme de los adinerados, así que a falta de un chándal para ir vestido, hemos pactado llevar americana, pero sin tampoco pasarnos. A Julio le toca la sesión siguiente, así que se prepare, porque el sí que está atrapado por la obligación del traje. Por otra parte, vendrán nuestros padres y familiares a vernos, así que para muchos la aventura de conseguir invitaciones extra ha sido una odisea sin éxito. En cualquier caso, tenías derecho a dos por graduarte, con posibilidad de pedir hasta dos más con cierta antelación (Para el hermano y la abuela).

Tras este trámite de apariencias, llega el momento de la diversión. Cada clase tiene planes diferentes, pero lo que es seguro es que, tras la copa de cava a la que nos invitan, nos marcharemos a la “Champanería” a continuar con la dinámica. Tan pronto estemos lo suficientemente etilizados (por decirlo suavemente) no iremos a cenar a un antro que se ha encargado de buscar Alberto (Gracias) donde nos darán alpiste para pollos y música. Una vez allí, pues a disfrutar y a pasar la noche hasta que el cuerpo aguante. Permitidme, que dedique unas líneas a estos años.

Compañeros de ciencia política, hemos llegado hasta aquí, lo que no es poco. Hemos lidiado con el derecho del Argentino, con “váyase al bar a fumar cien mil porros”, hemos aprendido a “Esturrbiá”, flipado con el formato de examen de RRII, combatido con Cienfuegos en Internacional, el Administrativo de la Cuchillo, Pinto y el “justo, justo…”, con el principio de Javi Cantero (Cuanto mas acelero, mas calentito me pongo), llorado con Comunitario de Morgades y reído con el “Método Delphi”. Hemos descubierto vocabulario mitopoyético en “Teoría Política”, jugado a Eurovisión con Casilda, temblado por Nagel, dormido con Estanis. Hemos “so” aprendido Política Española II, con Astudillo “y si…” en Actores y Comparada y flipado con la edad que debería tener un viejo “antifeixista” (Si hizo todo lo que dice…). Damas y caballeros, todo lo que hemos aprendido es el valor que le hemos dado a nuestro título, que revierte en nuestra grandeza y garantiza la continuidad de nuestra disciplina. Pero todo lo que hemos pasado juntos es la garantía de que, con todas las tribulaciones y momentos de alegría, ante todo, amigos, hemos vivido.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Los debates electorales

Una de las últimas cuestiones que está en litigio, en lo tocante a la campaña electoral para las Generales, es la posibilidad de realizar debates entre candidatos. Hace pocos días, en diferentes mítines, Zapatero y Rajoy cruzaron declaraciones a este respecto. Zapatero se mostraba “encantado de por fín, poder celebrar un debate (…) que en 2004 no se produjo”. Incluso llegó a proponer que se hiciera debate no solo entre los candidatos, sino también entre los equipos, por ser también importantes en los gobiernos. (Ya se lo podía aplicar él con algún ministro…) “¿Os imagináis a Rubalcaba debatiendo con Ángel Acebes” El público literalmente estalló en carcajadas. La respuesta de Rajoy no se hizo esperar y propuso no un debate, sino tres, en las cadenas Antena 3, Cuatro y Telecinco, para garantizar la pluralidad de foros en el enfrentamiento. “Los bloques podrían ser tres; materia autonómica y política territorial, política antiterrorista, seguridad e inmigración y política económica” añadió el candidato popular. Al final, se ha pactado que el número de debates sean dos, pero aún se deben acordar las condiciones de los mismos.


Analicemos cuestiones de estrategia electoral. Como nos demuestra la experiencia, los debates cara a cara solo se proponen cuando no existe un ganador claro en las elecciones y están muy reñidas. Tal fue el caso de las elecciones de 1993, con tres debates entre Jose María Aznar y Felipe González. ¿Y por qué en este contexto? La razón es que se confía en que un pugilato entre los candidatos pueda persuadir a los votantes indecisos por uno u otro candidato. Y estudios de comunicación política demuestran que en torno a un 11/ 17% decidió el partido a que votar y un 5% se resolvió participar electoralmente dado el debate de 1993. Es decir, que además de ser un ejercicio de transparencia para los partidos, es congruente con sus estrategias. En 1996, pese a ser unas elecciones reñidas, Aznar no quiso medirse con González, sobretodo porque ya era un candidato conocido y varias encuestas le hacían ganador. Se sospecha que de haber aceptado el debate y perdido, no hubiera ganado en 1996. Desde 1993 no se han celebrado más debates dado que el PP siempre ha tenido encuestas que le hacían ganador por una distancia superior a 4 puntos. El PSOE se quedó siempre con las ganas, porque el ganador en la carrera no quiere arriesgarse a ver comprometida su situación.


Sobre como celebrarlo, las razones por las que el PP quiere hacerlos en todos los canales menos en la primera son dos. Primera, porque así ataca a la TV pública de ser gubernamental. Eso, por supuesto, es objetivamente mentira, ya que nunca había tenido tanta pluralidad y tan poco control político (¿Imagináis “59 segundos” o “Tengo una pregunta para usted” en 2003?). Incluso el Director General fue nombrado por todos los partidos de común acuerdo (También el PP) En cualquier caso, no es como en la pasada legislatura, donde el director llegó a ser condenado por el Tribunal de Estrasburgo por manipulación y, por cierto, no lo movieron del puesto. La segunda razón es porque el debate en TVE obligaría a traer a todos los candidatos, incluyendo a todos los grupos minoritarios. Y eso aterra al PP, porque sabe que se convertiría en un “Todos contra Mariano”. Sobretodo dada su política de tierra quemada de esta legislatura, que le ha dejado como el segundo partido en representación pero completamente aislado de otros grupos políticos. En cualquier caso, parece razonable que los ciudadanos podamos escuchar a todas las alternativas políticas que se plantean.


Por lo tanto, ya vemos que los dos debates que presumiblemente habrá serán decisivos para estos comicios. Dado el virtual empate técnico, a ambos partidos conviene su celebración, pero incluso algo más al PP, por saber que puede reforzar así el perfil moderado de su candidato frente a algunos extremistas de segunda línea. Al PSOE siempre le convendrá, dada su nefasta política de comunicación esta legislatura, si logra llevar el debate al terreno de políticas sociales. Desde mi perspectiva, convendría que al menos uno de los dos se celebrara en TVE, porque para algo tenemos a la televisión pública (y la pagamos) y se podría garantizar la representación de no solo los grandes partidos, también otras fuerzas políticas. Sin embargo, soy poco optimista sobre esto último, ya que la campaña tiende a “presidencializarse” entre los dos grandes partidos. Con “Mariano es posible” frente a la “Z de Zapatero”, las siglas del partido desaparecen, en consonancia a campañas de marketing en la línea de los EEUU.


De cualquier modo, no está nunca de más que, aunque sea en condiciones de cara a cara, se celebren estos debates. Así los ciudadanos podremos contrastar de modo transparente las propuestas de los partidos. Aunque paradójicamente, y dada la imposibilidad de la mayoría absoluta, serán los que no están los que decidan de nuevo el rumbo del país. Las minorías.

martes, 11 de diciembre de 2007

Un viernes de cine



Este viernes tenemos los residentes de La Ciutadella la oportunidad de disfrutar de una sesión de cine. El “colectivo Malabarraca”, un grupo de residentes de la RESA de Tarrasa llevan ya un año proyectando películas para los estudiantes todos los martes por la noche. Como ellos mismos dicen “La filosofía es combinar el cine que nos gusta con la comodidad de casa”. En una iniciativa sin precedentes, y con el beneplácito de la dirección, el viernes 14 se desplazarán a nuestra residencia para proyectar la película “Una casa de locos”. Esta comedia europea trata sobre las visicitudes de un joven francés que vive un Erasmus en Barcelona.

Ya sabemos todos que estamos de exámenes y con un montón de agobio, pero la proyección del próximo viernes puede ser una buena excusa para desconectar. Merece la pena la película y el ambiente… En todo caso, os adjunto la dirección de correo de los organizadores (dimartsdecine@gmail.com) por si queréis más información o hacerles algún comentario. Por cierto, añadir que Genís, uno de os chicos de este colectivo, es hermano de Eugenia.

Alabo sin reservas esta genial iniciativa e invito a los residentes a pasar un buen rato de cine. Que corra la voz…

La voluntad de elegir

Al principio, esta entrada pretendía convertirse en algo más ambicioso. Tenía pensado introducir diferentes términos sobre las relaciones humanas de una forma fría y desapasionada. La idea era aportar algo y que luego cada cual tomara lo que más le interesase, esperando además generar bien de debate. Pero, si os digo la verdad, el texto me quedó tan oscuro y desestructurado que me decidí por retirarlo y hacer algo más sucinto y digerible. Para ello, me centraré sobretodo en analizar una sentencia que escuché hace tiempo “No puedo escapar de mi naturaleza” Esta frase, enunciada así, parece un poco ambigua, así que intentaré primero diseccionarla, para analizar sus implicaciones y por último, rebatirla.

¿Qué es la naturaleza de una persona? Bueno, es algo complicado de definir. No soy tampoco muy ducho en psicología, pero puedo distinguir al menos dos elementos diferentes. Uno es el temperamento y otro es el carácter. El carácter es una tendencia hacia un tipo de comportamiento que manifiesta el individuo. Todos los elementos que integran el carácter se organizan en una unidad que se conoce como estabilidad y proporciona al carácter coherencia y cierto grado de uniformidad en sus manifestaciones, con los cambios lógicos que ocurren a lo largo de la vida. En él intervienen principalmente las funciones psíquicas, así como la acción del ambiente. Es decir, que el carácter es un elemento mutable de la personalidad del individuo. Por el contrario, el temperamento es la base biológica del carácter y esta determinado por los procesos fisiológicos y factores genéticos que inciden en las manifestaciones conductuales. Ello implica que es un elemento estable de la composición de nuestra “naturaleza”

Es decir, que la psique de la persona se compone de un el elemento estable (temperamento) y otro variable (carácter). Según la escuela psicológica se puede argumentar la prevalencia de uno u otro elemento. Además, es bastante conocido los “tipos ideales” de constitución física que generan una tendencia al comportamiento (El gordo simpático, el delgado alto nervioso…) Esta es la base psicológica de la mente de los seres humanos. Lo que nos lleva de nuevo a la pregunta principal ¿Podemos escapar de nuestra naturaleza? Depende. Si somos restrictivos, asumimos el que las personas no cambian, y por lo tanto, por ejemplo, el ladrón siempre será ladrón, el jugador siempre será jugador. No hay rehabilitación posible. Siempre que digamos que son como son por su temperamento y no por su carácter. Es decir, que podríamos distinguir entre en cleptómano patológico y un chorizo. ¿El primero, podría no ser rehabilitable y el segundo si? Es una cuestión espinosa, porque implica establecer que el hombre no tiene control total sobre sí mismo…

Y quizás esto sea parcialmente verdad. Estamos más condicionados por la biología de lo que nos pensamos. Por ejemplo, ¿Cómo pensar que controlamos el amor, por ejemplo? Se trata de instintos biológicos. Pero, salvando las distancias, no podemos asumir que el ser humano no sea responsable de sus acciones. Y que no podamos moldear nuestro carácter. Existe la posibilidad de condicionarnos, por ejemplo, a evitar el ser agresivos con otras personas, o irreflexivos en nuestros juicios, o vehementes en nuestras discusiones… Es decir, que nuestra naturaleza se puede moldear (al menos parcialmente) con esfuerzo personal. Por lo tanto, es necesario un elemento más. La voluntad de realizar tal cambio. Es decir, que un ser humano no puede escapar de su aciago destino si no decide el sustraerse a este a través del esfuerzo de la voluntad.

Por eso no puedo suscribir esta frase: “No puedo escapar de mi naturaleza”. Si alguien es agresivo dado un condicionamiento biológico, es una persona enferma que requiere tratamiento. Pero si alguien tiene un carácter que le impulsa a agredir a los demás, no es cierto que no pueda luchar contra ello. No podemos controlar lo que sentimos, pero si lo que hacemos y como lo hacemos. Hay libre albedrío. Él puede elegir si pega a alguien o no, aunque tenga tal impulso. Lo que hace falta, a mi juicio, es que medie algo muy importante; y es la voluntad de resistir, la voluntad de elegir.


lunes, 10 de diciembre de 2007

Pitas, pitas... (O la política de cheques)

Como todos sabemos, desde las pasadas elecciones municipales estamos sumergidos en la campaña electoral para las Elecciones Generales de marzo del 2008. Y eso supone el que los dos grandes partidos pugnan diariamente por ganar espacio en los medios de comunicación y centrar la agenda a su favor. Ejemplos evidentes los tenéis en las campañas institucionales del “Gobierno de España” sobre el cheque vivienda, la campaña “Con Z de Zapatero” o los anuncios de rebajas fiscales del PP. La principal razón de estas campañas es que, demoscópicamente, los resultados entre ambos partidos están en un empate técnico. Lo que supone que la campaña de este año va a tener un peso capital, así como los debates entre candidatos, para decidir quien ganará (por la mínima) los próximos comicios. No tengo por propósito el pormenorizar el desarrollo de la campaña, sino centrarme en un instrumento concreto; las políticas de cheques como reclamo electoral.

Como es bien conocido, el gobierno ha lanzado los últimos meses una batería de políticas de cheques. Esta política se basa en la dotación a los individuos que cumplan un determinado perfil de una gratificación económica o una desgravación fiscal. Es decir, por cumplir estas condiciones se te paga o se te hace que no pagues. Las políticas públicas en cuestión son dos hasta la fecha: el cheque bebé de 2500 euros por hijo y las subvenciones al alquiler (pago de entrada y gratificación si eres “joven”). Trataré de analizar estas políticas de manera diferente para después conectarlas entre sí.

Si nos fijamos en el cheque bebé, este fue propuesto por el Presidente del Gobierno en el último debate sobre el Estado de la Nación. La razón era la necesidad de anotarse un tanto con repercusión social suficiente como para garantizar su victoria en el debate, y más ante la caída de moral que supuso la ruptura de la tregua de ETA. Evidentemente, fue efectivo. Sin embargo, su andadura parlamentaria fue más problemática. Se intentó poner en vigor desde la fecha del debate, y al final los grupos parlamentarios forzaron a ampliarlo desde el inicio del mes. Además, los grupos de izquierda consiguieron que el gobierno ampliara la ayuda a 3500 euros para madres solteras y que se incluyera en el proyecto la garantía de promover plaza de guarderías universales y la exención de IRPF a en trámites de acogida o adopción.

¿Y qué? ¿Pasa algo malo con el cheque bebé? Depende de cual sea su función. Si la idea es lograr comprar al votante y asegurar su apoyo, puede ser efectivo a corto plazo. A nadie le amarga un dulce. Pero si la idea es hacer una política coherente de familia, no parece ser una muy buena idea. Primero, porque es una medida regresiva. Como bien decía “El Jueves” en su portada censurada, si el Príncipe tiene un hijo, le deberían dar también los 2500 euros. Segundo, porque no es eficaz para promover la natalidad, ya que es una dotación ridícula que no revierte los elevados costes de tener un hijo en España. Es casi como recibir un regalo del Estado por nacer (¿Una tele de plasma?), pero no da para mucho en términos agregados. Y tercero, porque es incongruente con un modelo sostenible de políticas de natalidad. Para lograr que esta incrementara, más valdría gratuidad y universalidad de las guarderías para permitir que la mujer pueda incorporarse plenamente al mundo laboral (o no salir de él). Un sueldo más en casa si que ayuda a la natalidad.

Si nos fijamos en el Plan de Vivienda, anunciado a bombo y platillo por el Presidente y la Ministra Chacón, podemos ver como sigue un principio similar al del cheque bebé. De hecho, aún es más complicada su aplicación, ya que su desarrollo invade competencias municipales y autonómicas (Requiere coordinación con estos entes) y no podrá desplegarse hasta la próxima legislatura. De forma general, el Plan prevé el pago de la entrada de los pisos en alquiler y la dotación de una cantidad al mes del alquiler si eres joven (La edad es menor a 35 años). Bueno, analicemos esta política. ¿Quiénes están mayoritariamente en alquiler? Los jóvenes. Por lo tanto, a todos ellos se les pagará una parte de la entrada. Los caseros, por lo tanto, llegarán a la conclusión de que pueden incrementar esta entrada en la misma cantidad que aporta el Estado. La razón, hay un simple desplazamiento del equilibrio de la demanda, y la oferta incrementa en la misma cantidad el precio. Muy bien. Hemos logrado que los propietarios que alquilan cobren 500 euros más. ¿Y que ocurrirá con la dotación mensual? Pues exactamente lo mismo. De esa forma, en vez de construir vivienda pública de alquiler a precios más baratos gestionados por el Estado, confiamos en que el mercado reaccione como nos gustaría que lo hiciera. Eso es un error, pero no lo es todo el plan en su conjunto. Al fin y al cabo, en el Plan se incluyen previsiones para VPO, lo que es la verdadera política eficaz, no el cheque de alquiler, que es una cortina de humo.

Así, quiero extraer tres conclusiones sobre la política de cheques. Primera, que estas políticas no son congruentes con una gestión a largo plazo, sino que son de corto plazo y de una utilidad casi nula a efectos agregados. Pan para hoy y hambre para mañana. Segundo, que no son congruentes con una política de izquierdas, a la que se espera mayor consideración por los mecanismos redistributivos y por las personas de menos recursos. Y tercero, que la verdadera vocación de las políticas de cheques es servir como reclamo electoral, “regalando” dinero a los ciudadanos. Pobre sistema, porque asumen que los ciudadanos somos tontos. Y tontos, tontos, no somos…¿O si?

domingo, 9 de diciembre de 2007

La Caída de un Titán

Aquella fría noche de la víspera de los idus de Marzo, el cónsul Lépido organizó una cena en su casa en la ladera del Palatino. A la cena estaban invitados Casio, Marco Antonio, Junio Bruto y el dictador vitalicio, Cayo Julio César, con sus correspondientes esposas. Como es la tradición, los hombres se recostaban en el triclinio para comer mientras que las mujeres comían sentadas en sillas de madera frente a los hombres. En esta ocasión, César había cedido el lucus consularis, que se reserva al invitado de mayor rango. La idea era ponerse un poco más alejado del semicírculo que formaban los comensales con el objeto de poder dictar despachos a su escriba, con el que iba a todas partes. El dictador no era una persona glotona, y con un poco de pan con aceite y sal se daba por satisfecho.


A medida transcurría la cena, César solo prestaba atención puntual a los temas de conversación. En dos días abandonaría Roma con su ejército para encaminarse a la provincia romana de Asia. Desde allí, iniciaría una campaña de castigo para la conquista del Imperio Parto y, de paso, vengar la trágica muerte de su amigo Craso. Por estas razones, los preparativos eran frenéticos y el dictador quería dejarlo todo a punto. Incluyendo dejar a Lépido como cónsul en Roma frente a su primo Marco Antonio, sobretodo por la conocida afición de este último a la bebida, las rameras y el juego.


En un momento dado, surgió una conversación sobre cual era la mejor manera de morir. Casio comentó que lo mejor era morir con una espada en la mano, luchando contra enemigos. Bruto dijo que su modo ideal era en la cama, mientras dormías plácidamente. Entonces, César, que parecía distraído se encaró un momento con ellos y les dijo: “Repentinamente”. Una gota de sudor frío se deslizó por la frente de Bruto. Tras mirarles unos instantes, César volvió a abstraerse en sus asuntos. Esa noche muchos de los comensales no durmieron bien. La esposa de César, Calpurnia, le rogó que no asistiera a la sesión del Senado de mañana, que había tenido un sueño el que era asesinado. Bruto no pegó ojo en toda la noche, vagabundeando nervioso de lado a lado. Solo Porcia, su esposa, e hija de Catón de Útica (El difunto enemigo de César) le consoló esa noche para coger el sueño.


Cuando el gallo cantó por la mañana, César dio un beso a su intranquila mujer y salió por la puerta de la casa del Pontifex Maximus, en el bajo Foro. Se encontró con su tío abuelo, Lucio César, y juntos se encaminaron hacia la Curia de Pompeyo, donde se había convocado la sesión. Era paradójico que en la Curia construida por su enemigo en la guerra civil se fuera a aprobar la primera expedición contra un no-romano desde la Guerra de las Galias. Por el camino se toparon con un viejo adivino que gritó: “César, guárdate de los Idus”. El dictador le contestó que ya habían llegado y nada pasaba. “Sí, pero aún no han pasado”. Cleopatra, su amante, residía al otro lado del Tiber (al ser no-romana, no podía pisar el límite sagrado de la ciudad) y tras la sesión pasaría a visitarla por última vez. Estaría mucho tiempo fuera. Alguien de la muchedumbre pasó una nota para el dictador, pero éste se la guardó para leerla después de la sesión.


La Curia de Pompeyo estaba casi vacía cuando el dictador entró dentro, desplegó su silla curul y se sentó a redactar informes. Los senadores se iban congregando poco a poco. En la puerta, Casca entabló una conversación con Lucio César y Marco Antonio. Dentro, un grupo de senadores se acercó al dictador, con Décimo y Marco Bruto, Casio, Ahenobarbo entre ellos. Casi todos habían sido perdonados por César, pese a haber luchado en la guerra civil del lado de Pompeyo. Tulio Cimbro se adelantó para pedir el perdón para su hermano. César se negó, por haber sido imputado por corrupción antes del conflicto. Su negativa era la señal convenida por los asesinos. Los 48 senadores sacaron sus cuchillos y se abalanzaron sobre él, consumando una traición. Todos le dieron una puñalada, mientras que César, que al principio se resistió, después decidió por cubrirse la cabeza en señal de resignación. De todas, tan solo tres puñaladas fueron mortales, pese a que le dieron una en el ojo y otra en el escroto, como venganza por su belleza y virilidad. Al final, César se desplomó frente a la estatua de Pompeyo, cuya mirada de mármol contempló impasible la escena. Los traidores, asustados por su propia obra, salieron corriendo en todas partes, pese a los intentos de Casio y Bruto por detenerlos. César, muerto, quedó solo en medio de la Curia mientras que terribles rumores corrían por la ciudad…

miércoles, 5 de diciembre de 2007

La riqueza de los pueblos

Recientemente se han publicado en la revisa “Magíster” algunos avances relativos al informe PISA. Este estudio realizado por la OCDE cada 4 años se centra en el estudio de los sistemas educativos de los países miembros, generalmente incluyendo un análisis más específico en una asignatura. En 2003 la estudiada fue matemáticas y esta vez ha tocado a ciencias. Para su desarrollo, los estudiantes son sometidos a unos exámenes durante varios días en diversas aptitudes, eligiéndose forma aleatoria proporcional entre los centros de cada país. En el caso de España, casi todas las CCAA se ofrecieron para que sus datos figuraran como públicos (En 2003 solo lo hicieron País Vasco, Cataluña y Castilla y León). Como ha saltado a todos los medios de comunicación en estos días, los resultados obtenidos por España han sido desastrosos, muy por debajo de la media de la OCDE. Trataré de analizar a grandes trazos los elementos que se pueden extraer del informe y las causas que lo generan.

En primer lugar, los resultados. En todas las calificaciones correspondientes a matemáticas, comprensión lectora y ciencias, España está por debajo de la media. De hecho, Portugal y Grecia son de los únicos tres países que están peor que nosotros. Si analizamos por comunidades autónomas, La Rioja, Castilla y León y País Vasco son los que destacan (al nivel de los primeros de Europa), mientras que Andalucía y Extremadura se sitúan en la cola (al nivel de los peores). Además, los resultados obtenidos este año son de media 5 puntos inferiores a los del año pasado. Luego nuestro sistema educativo se caracteriza por tres trazos. El primero, que nos situamos de media muy lejos del resto de países europeos. El segundo, que cada vez estamos peor. Y el tercero, que presentamos unas grandes diferencias entre regiones. Desde luego, el panorama no es nada alentador, si asumimos que la educación es crucial. Más utilitariamente, porque supone riqueza para un país en términos de capital humano, pero más humanamente, porque la educación posee per se un valor intrínseco para la formación de ciudadanos plenos, libres y capaces. Para saber por qué nos encontramos en esta situación, conviene rastrear las causas posibles.

En primer lugar, analicemos razones estrictamente políticas. De forma general, las normativas de educación se han caracterizado por ser cambiantes en función del partido en el gobierno. Desde la entrada de la LOGSE, no ha habido sino cambios continuos en los temarios, asignaturas, etc… Más aún, las competencias educativas han tendido a descentralizarse, luego las CCAA han tenido mayor autonomía para fijar sus currículos, controlar el gasto público en educación, conciertos con escuelas privadas y demás. Las cambiantes normativas de educación son algo negativo sin paliativos, por suponer quemar a generaciones enteras con niveles de formación muy deficiente. La descentralización no es necesariamente mala, pero implica asumir que las responsabilidades pasan a ser compartidas, luego la mala coordinación entre administraciones puede lastrar un problema.

Sobre las razones de mecánica, podemos compararnos con el sistema educativo finlandés, de nuevo, el campeón de Europa. Sobre el profesorado, por ejemplo, ellos se destacan por obligar a una formación muy completa a los que acceden a tal carrera. En términos de selectividad, reclaman un 9, frente al 5 de España. Además, la dotación de recursos para la escuela (sobretodo la pública) es muy notable. La ratio de profesor por alumno en España ronda las 30 personas, en Finlandia las 11. Como añadido, poseen una gran cantidad de formadores de apoyo para alumnos con deficiencias. En España, esto todavía está implantándose. Donde Finlandia llega a la inversión del 7,3% del PIB en educación, España estamos en torno al 4%. Por su parte, en España las diferencias entre la escuela privada/ concertada y pública son notables. Los primeros poseen una dotación del Estado además de la propia y pueden establecer criterios para impedir el acceso a alumnos o colectivos más problemáticos (por ejemplo, inmigrantes que no conozcan el idioma). De esta manera, los colectivos más desfavorecidos van más a la pública, lo que la convierte en una escuela de segunda división, con menos medios, más masificada y alumnos más complicados.

Por lo tanto, parece que tenemos un profesorado menos formado, menos numeroso, menos especializado y en general, unas escuelas públicas con menos recursos que las privadas y con problemáticas mayores. Estos elementos se ven matizados en función de la CCAA, que dispone de autonomía para potenciar o no la educación en su región con mayores esfuerzos.

Esta situación está creando una estructura de oportunidades que hipoteca el conjunto de nuestro país. Con unos profesionales peor formados, con menos oportunidades, con una menor riqueza para nuestro país y una ciudadanía más iletrada. Sin embargo, pese a todo, hay que hacer un homenaje al colectivo de los maestros que luchan con denodados esfuerzos por la formación de nuestros adolescentes. Y confiar en que algún día nos decidamos por buscar la salida a este callejón en el que estamos encerrados, que requiere un verdadero compromiso colectivo. Porque la educación, como decían los antiguos, es la verdadera riqueza de los pueblos.

lunes, 3 de diciembre de 2007

1982: la huida hacia adelante

El 28 de octubre hizo 25 años desde la victoria del PSOE, que en 1982 estableció el primer gobierno de Felipe González y que habría de gobernar durante 14 años en España. Más allá de la propia etapa histórica, que puede ser sometida a diferentes exámenes por sus luces y sombras, me gustaría centrarme en el valor que tuvo esta victoria para la consolidación de la democracia en España. Era una victoria que marcaba un hito por al menos tres razones. La primera, el acceso al poder del primer gobierno de izquierda desde la II República libremente elegido. La segunda, por el haberse frustrado hace bien poco el golpe del 23-F, así como otras asonadas que intentaron impedir las elecciones del ochenta y dos. Y la tercera, porque marcaba el punto desde el cual el fantasma del franquismo se alejaba para siempre de la vida política española y se sentaban las bases del estado democrático y de derecho. El partido (que nunca terminó de serlo) que había gobernado anteriormente, la UCD se practicó el harakiri. Adolfo Suárez había presentado su dimisión y Leopoldo Calvo Sotelo había gobernado con dificultades un año antes de convocar elecciones generales. De hecho, fue él quien hubo de lidiar con el golpe de Tejero y una situación de tensión insoportable. Eran los tiempos en los que ETA trabajaba a razón de dos asesinatos por día.

Desde el punto de vista político, la abrumadora victoria del ´82 supuso la consagración de un bipartidismo imperfecto en España. Previamente, había un partido de centro izquierda y derecha, PSOE y UCD, con el PCE y Alianza Popular a cada extremo. Sin embargo, con la desaparición de UCD, Alianza Popular (Hoy Partido Popular) pasó a capitalizar todo el espectro de la derecha. Si bien es cierto que con Manuel Fraga esta formación no superó el techo de los 26% de apoyo, con Jose María Aznar llegó al gobierno en el 1996 y con absoluta en 2000. La que probablemente ha sido la más larga travesía del desierto de un partido democrático en España. Izquierda Unida, que surgiría como plataforma en contra de la entrada en la OTAN no logró mejorar mucho respecto del PCE, en parte también por culpa de la ley electoral. Además, el voto útil siempre le ha resultado muy perjudicial. Respecto de los restantes miembros de UCD se fueron o bien escorando a la izquierda (Fernández Ordoñez o Martín Villa) o hacia la derecha (Como Gallardón o Sotelo). En todo caso, los partidos nacionalistas no se vieron especialmente turbados por el terremoto del ´82, sobretodo porque en Cataluña y País Vasco el nacionalismo moderado supo resistir el embate y captar votos de centro derecha.

En la primera legislatura del PSOE se inició el proceso de descentralización que nos llevaría al Estado de las Autonomías y se empezaron a poner en vigor las principales leyes de gobernación del Estado. Así, se aprobó el Código Penal, la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, Ley de Prensa, Estatuto de los Trabajadores… De forma que empezamos los españoles a respirar un poco más tranquilos sabiendo que se podía discutir de las políticas, pero no del sistema. Además, se instauró el IRPF, la Seguridad Social, o el Servicio Nacional de Salud, es decir, que se asentó un proto-estado del bienestar. En 1996, con la victoria del Partido Popular se demostró que la democracia no solo había quedado consolidada, sino que era posible la alternancia.

Y precisamente, para que esta última fuera posible, el esfuerzo de los españoles en 1982 fue crucial. No porque el PSOE fuera el mejor partido posible, sino porque supuso una huida hacia delante. En España se dio un portazo definitivo a nuestro sangriento y autoritario pasado. Gracias a esa voluntad, hoy podemos disponer de un sistema democrático garante de libertades y derechos. Recordemos entonces aquellos momentos como una parte más de nuestro patrimonio común, el día en que los españoles, sin miedo, nos abrazamos a la libertad.

domingo, 2 de diciembre de 2007

Cerrando el trimestre

Si como en las películas del Oeste pudiera rodar una pelotilla de paja, estos días circularía por los pasillos de la residencia llevada por el viento. El viernes fue el último día de la décima semana, lo que quiere decir que ya se han suspendido las clases en la universidad. Todos los temarios están cerrados, las notas de prácticas, contabilizadas. El lunes a la vuelta del puente empieza la primera tanda de exámenes del curso y para muchos, la primera de la carrera. Para otros, la última en España. Casi todo el mundo se ha ido a su casa a estudiar. Básicamente porque allí no se distraerá con el ambiente cargado de fiesta que había en la residencia, y también porque así se deja de preocupar de los quehaceres de la vida diaria. Al menos, te puedes centrar sólo en estudiar. Así que la cuarta planta está un poco vacía. Los pocos que no se han ido lo harán en breve, quedándose únicamente los que aún tienen que acabar trabajos, o simplemente, los que confían en estudiar más aquí que en casa.

Pero no todo son malas noticias. Para los que aún no lo sepan, Manolo ha dejado de ser segurata de la residencia. Por fin, el mismo que hacía rondas a las 12, que nos reñía sin motivo, que nos amenazaba de muerte, el que se cagaba en nuestros muertos jurando por su santa madre… Se ha marchado. Ha sido probablemente el segurata más idiota y borde que jamás he conocido en mis cinco años de residencia. De hecho, ha tenido problemas con casi todo el mundo. Sus facciones delgadas, sus dientes raídos y sucios, su asqueroso acento ronco con deje andaluz… pueden ser olvidados para siempre. Ahora han puesto de forma provisional a un chico marroquí muy simpático que trabaja de forma regular en la residencia de Paralelo. Ya veremos a quién dejan aquí de forma permanente, pero seguro que cualquier cambio es a mejor.

En este trimestre siempre queda el consuelo de saber que en que terminemos están las Navidades a la vuelta de la esquina. Un descanso para ponerse las botas. Pero mientras, las tentaciones de los turrones y villancicos te saturan la cabeza. No os preocupéis, porque esta es de las mejores tandas. Sobretodo porque tienes el puente para estudiar antes. En las demás no hay periodo sin clases previo al inicio de la traca. Lo único que fastidia es compararse con otras universidades, que se toman el puente de vacaciones. No desesperéis. A ellos les espera un inicio de año poco alentador.

En resumen gente, que aprovechéis bien el puente y que tengáis suerte en esta tanda que empieza.

sábado, 1 de diciembre de 2007