La polémica a propósito del Parque de “La Estación” mantiene un cauto compás de espera, mientras que el Ayuntamiento busca cómo salir del entuerto en el que él mismo se ha metido. Sin duda les ha sorprendido encontrarse con una oposición tan importante a su proyecto, y más aún, con una Plataforma Ciudadana en pie de guerra. Pero empecemos por el principio…
En la pasada legislatura, el PR apoyó la investidura del alcalde, José Antonio Abad a fin de lograr apartar al PSOE del ayuntamiento, en el que había estado gobernando desde casi el principio de la democracia. Para los que no conozcan el contexto de La Rioja diré que se trata de una CA uniprovincial caracterizada por su inframunicipalismo, y donde el gobierno regional ejerce a la vez de comunidad autónoma y de diputación provincial. Con pequeños pueblos dispersos (a excepción de Logroño, con la mitad de la población de la región), su suficiencia financiera y los proyectos e infraestructuras dependen mucho de una buena sintonía con el partido que gobierne La Rioja. Las últimas cuatro legislaturas, el PP ha tenido la mayoría absoluta en el Parlamento y ha podido boicotear a los municipios de distinto color político, con resultados dispares. Ello hizo que en Arnedo, esta lógica tuviera su repercusión. Tener un ayuntamiento de distinto color es perjudicial, y dado que es más probable que el PP gane en Arnedo a que pierda en la región, mejor será apoyar a los populares en ambos lugares para que el municipio se beneficie. Esta situación, combinada con el desgaste de presentar el PSOE al mismo candidato tanto tiempo, hizo que los populares ganasen en Arnedo y se pudieran coaligar con el Partido Riojano (aunque por la mínima).
La alternancia supuso que muchos ciudadanos esperaran que “camiones de euros” llegaran de Logroño para compensar a Arnedo por la falta de inversiones pasadas, teniendo ahora un ayuntamiento afín. Y con más razón, si era un feudo inseguro. Así fue, en efecto. Se cambió todo el centro del pueblo (con un estilo hortera, si se me permite), se hizo el centro de Salud, se asfaltó la C/ Constitución, Centro Joven y Caja Rioja y, pese al revuelo de taurinos y la propuesta de referendum, hoy se construye la nueva Plaza de Toros multiusos. El ayuntamiento, pese a este programa de obras públicas, tuvo algunos errores de gestión. Lo curioso fue que en las siguientes elecciones, el electorado castigó por estos errores al Teniente de Alcalde, “Pergolín”, del PR y dio la mayoría absoluta al Partido Popular. Pese a que sé de buena tinta que el no fue el responsable de estos, la mala prensa del personaje hizo el trabajo. Ahora, se decían los ciudadanos, si el PP tiene la absoluta en Arnedo, al no tener a un partido bisagra en el Ayuntamiento acaparando poder, habrá más orden y mejor gobierno.
Pero ¡Ay!, la lógica era perversa, y la fortuna la agravó. Era perversa porque aunque todos pensaban que ahora el Gobierno de la Rioja (de nuevo, del PP) haría inversiones notables en Arnedo, nadie previó que quizás los políticos arnedanos estarían más interesados en pagar favores a Logroño para hacer carrera en el Gobierno de La Rioja. Y por eso, tras subirse el Alcalde el sueldo (con el imperdonable apoyo del PSOE), comenzó el desfalco de nuestro patrimonio. Primero, cediendo unos terrenos gratis al gobierno regional. Y ahora, transigiendo con pagar la mitad del coste del colegio de nueva construcción y montando un pelotazo urbanístico en medio del pueblo para financiarlo (presuntamente). Porque la fortuna quiso que el PP perdiera en el ayuntamiento de Logroño, y no hay duda que no pocos favores se han quedado sin pagar, pensando en cualquier constructora con un poco de ambición. Suculento premio, el parque de “La Estación”. Así que, aunque parezca extraño (o no), ahora es Arnedo la que paga con creces los favores de la anterior legislatura, con menoscabo del patrimonio de todos sus ciudadanos.
El otro día el alcalde dijo que, si de verdad lo estaban haciendo mal, serían los ciudadanos los que lo sancionarían en las urnas. Y dado que en las pasadas elecciones ganó su partido, disponen ahora de la autoridad democrática para hacer cualquier proyecto. Curiosa concepción de la democracia la que entiende que nuestros gobernantes tienen un cheque en blanco. Porque muchas de las malas decisiones que toman tienen efectos irreversibles, como es el caso. Atentos; en el último pleno ya hubo una concentración de mil ciudadanos frente al ayuntamiento y cada vez más voces (el arquitecto municipal, sin ir más lejos) se postulan en contra del proyecto. Porque, como bien dice Maquiavelo: “un hombre prudente jamás rehúye el juicio del pueblo, pues rara vez se equivoca en los asuntos particulares que afectan a su interés (…) y si lo hace, siempre lo hará menos que un hombre solamente”
En la pasada legislatura, el PR apoyó la investidura del alcalde, José Antonio Abad a fin de lograr apartar al PSOE del ayuntamiento, en el que había estado gobernando desde casi el principio de la democracia. Para los que no conozcan el contexto de La Rioja diré que se trata de una CA uniprovincial caracterizada por su inframunicipalismo, y donde el gobierno regional ejerce a la vez de comunidad autónoma y de diputación provincial. Con pequeños pueblos dispersos (a excepción de Logroño, con la mitad de la población de la región), su suficiencia financiera y los proyectos e infraestructuras dependen mucho de una buena sintonía con el partido que gobierne La Rioja. Las últimas cuatro legislaturas, el PP ha tenido la mayoría absoluta en el Parlamento y ha podido boicotear a los municipios de distinto color político, con resultados dispares. Ello hizo que en Arnedo, esta lógica tuviera su repercusión. Tener un ayuntamiento de distinto color es perjudicial, y dado que es más probable que el PP gane en Arnedo a que pierda en la región, mejor será apoyar a los populares en ambos lugares para que el municipio se beneficie. Esta situación, combinada con el desgaste de presentar el PSOE al mismo candidato tanto tiempo, hizo que los populares ganasen en Arnedo y se pudieran coaligar con el Partido Riojano (aunque por la mínima).
La alternancia supuso que muchos ciudadanos esperaran que “camiones de euros” llegaran de Logroño para compensar a Arnedo por la falta de inversiones pasadas, teniendo ahora un ayuntamiento afín. Y con más razón, si era un feudo inseguro. Así fue, en efecto. Se cambió todo el centro del pueblo (con un estilo hortera, si se me permite), se hizo el centro de Salud, se asfaltó la C/ Constitución, Centro Joven y Caja Rioja y, pese al revuelo de taurinos y la propuesta de referendum, hoy se construye la nueva Plaza de Toros multiusos. El ayuntamiento, pese a este programa de obras públicas, tuvo algunos errores de gestión. Lo curioso fue que en las siguientes elecciones, el electorado castigó por estos errores al Teniente de Alcalde, “Pergolín”, del PR y dio la mayoría absoluta al Partido Popular. Pese a que sé de buena tinta que el no fue el responsable de estos, la mala prensa del personaje hizo el trabajo. Ahora, se decían los ciudadanos, si el PP tiene la absoluta en Arnedo, al no tener a un partido bisagra en el Ayuntamiento acaparando poder, habrá más orden y mejor gobierno.
Pero ¡Ay!, la lógica era perversa, y la fortuna la agravó. Era perversa porque aunque todos pensaban que ahora el Gobierno de la Rioja (de nuevo, del PP) haría inversiones notables en Arnedo, nadie previó que quizás los políticos arnedanos estarían más interesados en pagar favores a Logroño para hacer carrera en el Gobierno de La Rioja. Y por eso, tras subirse el Alcalde el sueldo (con el imperdonable apoyo del PSOE), comenzó el desfalco de nuestro patrimonio. Primero, cediendo unos terrenos gratis al gobierno regional. Y ahora, transigiendo con pagar la mitad del coste del colegio de nueva construcción y montando un pelotazo urbanístico en medio del pueblo para financiarlo (presuntamente). Porque la fortuna quiso que el PP perdiera en el ayuntamiento de Logroño, y no hay duda que no pocos favores se han quedado sin pagar, pensando en cualquier constructora con un poco de ambición. Suculento premio, el parque de “La Estación”. Así que, aunque parezca extraño (o no), ahora es Arnedo la que paga con creces los favores de la anterior legislatura, con menoscabo del patrimonio de todos sus ciudadanos.
El otro día el alcalde dijo que, si de verdad lo estaban haciendo mal, serían los ciudadanos los que lo sancionarían en las urnas. Y dado que en las pasadas elecciones ganó su partido, disponen ahora de la autoridad democrática para hacer cualquier proyecto. Curiosa concepción de la democracia la que entiende que nuestros gobernantes tienen un cheque en blanco. Porque muchas de las malas decisiones que toman tienen efectos irreversibles, como es el caso. Atentos; en el último pleno ya hubo una concentración de mil ciudadanos frente al ayuntamiento y cada vez más voces (el arquitecto municipal, sin ir más lejos) se postulan en contra del proyecto. Porque, como bien dice Maquiavelo: “un hombre prudente jamás rehúye el juicio del pueblo, pues rara vez se equivoca en los asuntos particulares que afectan a su interés (…) y si lo hace, siempre lo hará menos que un hombre solamente”
No hay comentarios:
Publicar un comentario